The Raven has landed: Live Mexico 2019
Raven en vivo, Ciudad de México. 31 de mayo de 2019: Sombras negras sobre el Circo
Por Sergio PescadorUna de las mejores experiencias para cualquier melómano, es ver una de tus bandas favoritas en el escenario.
Observar canciones que te han acompañado incontables ocasiones, recreadas fielmente es muy reconfortante.
Raven tocó por vez primera en Ciudad de México.
Lo bueno.
Set List.
Muchos 'reporteros ' escriben reseñas de conciertos o discos, confundiendo nombres de canciones o miembros de la banda; o limitándose a simplemente copiar el setlist, con las obligadas faltas de ortografía.
Raven resultó muy satisfactorio, abrir con Take Control, seguida de Destroy all monsters fue más duro que el fraude boxistico Canelo-Golovkin. Hell Patrol serrucho el frío clima. Hang,drawn and Quartered y Faster than the speed of Light, impresionantes al ser temas veloces fielmente recreados. Hasta el mediocre On and on sonó vigoroso con una inyección de adrenalina que carece la toma de estudio. Una inesperada canción nueva apareció, su próximo material será tan bueno como ExtermiNation. Fire power y Blood runs red, donde John explicó el suceso bélico en que está basado sacaron chispas. Era obvio cerrar con Break the Chain. I don't need your money fue el insospechado segundo encore.
Voz.
La garganta de John suena saludable y feroz, sus gritos agudos fueron naturales dejando en ridículo a Rob Halford o Geoff Tate, contemporáneos que han descuidado su regalo divino.
Ejecución.
Nunca me había percatado de la maestría de John al bajo, nada que lamentar. Tocando sin plumilla, a la altura de dioses como Steve Harris o el nunca olvidado Cliff Burton, añadiendo que el también canta como Geddy Lee.
Mark, es simplemente un ventrílocuo con su guitarra. Su rostro expresó su entrega y dedicación.
Mike, los cimientos tras la batería, gran adquisición.
La manera en que John y Mark bromean entre ellos y con la audiencia muestra a 2 adolescentes de 14 años, 8 lustros después, dedicados a su plan de vida. Alegría y desvaríos sanos.
La interacción con la audiencia.
John es el maestro de ceremonias de este demencial circo; el tipo no se queda quieto un momento, castigando su bajo, cantando afinado e invitando a todos a participar y pasarla excelente, incluso hablando en español.
Lo malo.
Solos.
Apestan. Masturbación extendida sin sentido.
Alargar canciones.
Tú lo conoces, el canta y tu respondes innecesario.
Covers.
Con una trayectoria y repertorio como el de Raven, breves fragmentos de ACDC, UFO y Black Sabbath en un medley no sonaron mal. Basar tu concierto en canciones ajenas sólo está autorizado a Matute o Quiet Riot. Evitando estos 3 puntos nos hubiéramos deleitado con 3 canciones más.
Merchandise.
Si la gente paga $700 por un boleto, ¿por qué no ofrecer souvenirs originales? El póster de la gira en sus tonos metálicos es glorioso. La playera negra ilegal no lo es. Así mismo alguien pudo llevarse el CD nuevo original.
En resumen, una grata experiencia.
Raven, lunáticos de corazón.
Comentarios
Publicar un comentario